sábado, 22 de septiembre de 2007

La finalidad del éxito en la vida

En un fragmento de la publicación "El libro del Ego" del filósofo y místico hindú Osho habla sobre el éxito y la ambición, como condiciona a aquellos que pretenden hacer su sueño realidad.

Habla del contenido de un libro titulado "Conversaciones con Willie", escrito por Robin Maugham, sobrino del conocido escritor Somerset Maugham se expone unas conversaciones entre el sobrino Robin y el escritor Somerset que nos hará reflexionar sobre la finalidad del éxito en la vida.

"Somerset Maugham fue una de las personas más famosas, más ricas y con más éxito del siglo XX. Era rico, con fama mundial y todo lo demás, y a los noventa años, seguía ganando una fortuna, a pesar de llevar muchísimo tiempo sin escribir gracias a los derechos de autor. Por desgracia, lo único que no le había reportado tanto talento y tanto éxito era la felicidad. Era el hombre más triste del mundo."

Continua con un fragmento del libro de Robin Maugham:
"- ¿Cuál es el recuerdo más bonito de tu vida?, le pregunté.
- No se me ocurre ninguno, contestó.
- Miré a mi alrededor (dice el sobrino), el salón con el mobiliario inmensamente valioso, los cuadros y los objetos de arte que su éxito le había permitido adquirir. Su casa, y el maravilloso jardín en un enclave prodigioso a orillas del Mediterráneo, tenía once personas a su servicio, pero no era feliz.
Al día siguiente mientras leía la Biblia dijo:
- He encontrado la cita "de qué le sirve a un hombre ganar el mundo si pierde su alma?". Entrecruzó y separó las manos con desesperación y añadió
- Querido Robin, he de decirte que ese texto estaba colgado enfrente de mi cama cuando yo era pequeño".
Después le llevé a dar un paseo por el jardín y dijo:
- Verás. Cuando me muera me lo quitarán todo, los árboles, la casa, hasta el último mueble. No podré llevarme ni una mesa". Y se echó a temblar, muy triste.
Guardó silencio un rato mientras paseábamos por un naranjal y dijo:
- He sido un fracasado durante toda mi vida".
Intenté animarlo.
- Eres el escritor vivo más famoso. Eso significará algo, ¿no?.
- Ojalá no hubiera escrito una sola palabra, ¿De qué me ha servido? Mi vida ha sido un fracaso, y ahora es demasiado tarde para cambiar. Demasiado tarde.
Y se le llenaron los ojos de lágrimas."

Osho añade a modo de comentario:

"Somerset Maugham vivió en vano. Tuvo una larga vida (noventa y un años) y podría haber sido un hombre muy feliz, satisfecho, pero solo si el éxito pudiera proporcionarlo, si las riquezas pudiera proporcionarlo. En última instancia, el nombre y la fama carecen de importancia: lo único que cuenta a la hora de la verdad es cómo hayas vivido cada momento de tu vida. ¿Con alegría? ¿Como una fiesta? ¿Has sido feliz en las pequeñas cosas?. Al darte un baño, tomar un té, barrer el suelo, pasear por el jardín, plantar un árbol, hablar con un amigo, mirando la luna, o simplemente estar sentado en silencio con la persona amada. ¿Irradiabas alegría? Eso es lo único que importa. Los que búscan riquezas no son realmente ricos, son pobres que se engañan a sí mismos y a otros, haciendo creer que son ricos. En el fondo son mendigos.

La educación en vuestros colegios y universidades os corrompen. Una educación errónea basada en la ambición, en ser alguien, creará el infierno en la tierra. Nadie es inferior y nadie es superior, porque cada individuo es único, y no existe comparación posible."

Es un planteamiento sin cortapisas, abandonar las premisas que nos separan de nuestra auténtica naturaleza. ¿De qué sirve tantas posesiones y tanta riqueza si un día estaremos muertos?, la sociedad actual está muy centrada en el materialismo, prioriza el "tener" frente al "ser". Parece como si la sociedad dijera cuantas más cosas materiales te rodeas, más "eres". Cuánto más se alardea y más identificado se siente de las posesiones materiales, es cuando en realidad más vacío es uno mismo y más espera que las posesiones materiales hablen por él en su lugar. Aprovechemos el tiempo que se nos ha dado para disfrutar plenamente de la alegría de realizar acciones que no hagan daño a los demás.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno...muy cierto en lo que a mi respecta.

Anónimo dijo...

La finalidad de la vida es aprender a no poner como primera prioridad las cosas que adquirimos o los titulos o para qué competimos, sino en aprender a cuidar por sobre toda las cosas la vida. Es un mundo donde nada se nos niega, lo bueno o lo malo y sólo está en nosotros aceptar o rechazar una u otra cosa, libremente

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